Analogía. (inútil).

Odio que los automovilistas me cedan el paso esperando en un cruce. Se que es una actitud que a decir verdad no posee ninguna logica ni justificación, es más bien una especie de cuestión de ego, o autosufuciencia. Hace mucho que manejo el "timing" justo al atravesar (sin ninguna prisa, pero tampoco demasiado lento) la paciencia, la seguridad y la decision para hacerlo sin correr ni ocasionar que los autos frenen, continua la fluidez para ellos y para mi si no creen su deber esperar. Cuando me ceden el paso, además sentir que es algo innecesario, me fastidia el sentir que me cortan el ritmo constante y preciso que llevo al andar, mi ritmo. Me obligan a apresurar el paso, o a titubear, es como si alguien me interrumpiera en una actividad de crucial relevancia.

Me gustaría ser tan eficiente a la hora de las relaciones interpersonales como cuando cruzo una calle.