True blog waits.

Malpagado, malhablado y malquerido.

miércoles, febrero 01, 2012

Cronicicleta. 6

Llovió ayer por la tarde (si, a finales de enero). La calle mojada será mi muerte, aún con los frenos ya bien puestos no conté con que el pavimento bien mojado (aún chispeaba cuando salí rumbo a casa) estos mismos frenos de varilla no funcionan del todo (por no decir que prácticamente nada). Entonces casi sin frenos, y con visibilidad limitada (por el agua en mis lentes y los ojos llorosos por el viento frio) con extrema precaución logré llegar al hogar. Ni pensar en arrojarme por las pendientes así; a duras penas pude frenar en un tope sobre la López donde todos los autos se iban amontonando, de hecho no frené, apenas disminuí la velocidad lo suficiente con el talón de mi pie para poder pasar entre ellos. Casi arrollo a unos trabajadores que iban cruzando la calle por San Lucas también, se aventaron corriendo sin contar que yo no podía o disminuir la velocidad tan de golpe y apenas esquive a uno. Baje caminando hacía Santa Mónica, y pues al final llegué completo. 
Con lluvia no hay frenos, sin frenos no hay bicicleta, ahora lo se.