Cronicicleta. 3

Me caí cruzando Lomas Verdes antier cuando pase sobre tierra suelta. Se soltó la cadena y al no poder ponerla sin desmontar la llanta tuve que dejarla en "la oficina". La pude poner hoy pero al montar la llanta (la de atrás) ya no giro como debiera, parece que se jodió el balero.
¿Será este el –prematuro– fin de la cronicicleta?

Si estoy comprometido con algo, a mi ni el clima, ni la enfermedad (ni la plomería) me sirven de pretexto... nomas digo.

Los tacos se piden con todo... pinches jotos.

Cronicicleta. 2

El peatón (el de a pie) tiene la impresión que la banqueta en toda su extensión le pertenece.
El automovilista común siente que la calle entera es suya y de nadie mas.
Buscarte un espacio en cualquiera de estas áreas les significa un invasión aparentemente.
Debería haber entonces una especie de limbo, ideal para circular en bicicleta.

La incredulidad de la gente equivale a la falta de asombro a la que nos enfrentamos como generación. Todo lo sobredimensionamos, todo lo sabemos.

No sabemos una mierda.

Nadie me necesita... y eso esta bien.

... luego dicen: Es que en el país "algo" no anda bien...

NADA ANDA BIEN.

Quiero chichis.

Cronicicleta. 1

Ayer me estampe con una camioneta estacionada, con la bicicleta... No me paso nada.

¡Todos para todos!...

Debiera ser nuestro grito de independencia. Uno global.

Pero el verdadero es:
¡Cada uno para si mismo!... Y así.