True blog waits.

Malpagado, malhablado y malquerido.

viernes, enero 28, 2011

Había un banda tocando en mi cabeza.

Con todas ellas ha llegado un punto en que me vuelvo inflexible. Ya por el final de las relaciones (muy al final... incluso después) en algún momento termino siendo indiferente ante el dolor que mis actitudes pueden llegar a causar. En todas ellas, al final una conversación termina en una especie gemido de su parte, como un pujido; entre que algo molesta pero al mismo tiempo entristece.
Después de ser yo el que recibe la mayor parte de los putazos el ultimo golpe asestado me ha correspondido por derecho. Menos con Vania.
Me puse a pensar y puede que sea por que en ella nunca he sentido alguna intención legitima (consciente o inconsciente, no importa) de lastimarme. Eso, o que todavía no acaba el round.

Tratando de encontrar que es lo que ha dejado de funcionar (si es que algo realmente funciono alguna vez) en la banda, caí en cuenta de algo. Uno de los problemas principales es que dejamos de ser una pandilla, porque mas que un grupo de "rock" nos comportábamos como eso (me quedo muy claro aquello después de leer el prologo que venía en el disco 'wow' de fobia), aparte de la música y al margen de ella, jalábamos parejo y juntos por lo general, buscando en que meternos, ya fuera en pedos, o en empresas imposibles o ilusorias, a veces haciendo nada, pero juntos igual, fastidiándonos o lo que sea, unidos. Lejos de lo divertido que llegara a ser, tenía una función aquello, eramos una unidad, y funcionábamos como tal. ¡Funcionábamos!

Eso, como todo en algún momento, llego a su fin, y esa cohesión que nos impulsaba en la cuestión musical se rompió. Y no que este mal que las cosas cambiaran, simplemente pasa, y consciente de ello y todo me pone a pensar que si no encontramos otra forma de funcionar esto no logrará arrancar de nuevo, porque por más que tratemos, aquello que fue en algún momento jamás volverá a ser igual, no como lo conocimos, cambió, la cosa es que no he logrado descifrar la nueva dinámica, no se me ocurre como puede esto volver a funcionar.

lunes, enero 17, 2011

Parte Dos.

Le conté a mi madre hace como una semana que me fui caminando desde la casa (Por Santa Monica en Tlalnepantla) al metro Auditorio (Nacional). No se cuantos kilómetros sean, pero fueron como dos horas y media de camino, a paso medio rápido. Me dijo con una voz entre de extrañeza y desaprobación (por haber caminado todo eso y no haberme ido en camión) que me parecía a mi papá. No alcance a reaccionar con velocidad normal ante lo que me había dicho. Pensé que se refería a mi abuelo, a Lino, su padre. Pensé que se había equivocado. Pensé eso porque a el le gustaba caminar (creció en un rancho en Teziutlán, Puebla), siempre caminó mucho, para su edad sobre todo. Desde los ochenta y tantos años que debe haber tenido por las fechas en que yo nací, me dejaba atrás caminando en la calle, y yo tenia que apurar el paso, o casi correr tras el, así me acostumbre a caminar por casi 26 años que el siguió vivo después que yo nací; rápido. Pensé por eso, que mi madre se había equivocado. Que se refería a el, y no a mi padre, Juan Fajardo, con aquello que había acotado.
Pero dude, y paso un rato, unos segundos nada mas, pero mas de los necesarios para que hubiera sido una reacción inmediata. –¿A mi papa?– le pregunte. Me contó que el hacía eso, que se aventaba caminando distancias considerables, por gusto, no por necesidad al parecer.
–Una vez me contó que se fue caminando hasta casa de su mamá– me dijo. Eso (la casa de mi abuela paterna) esta por los rumbos del oriente de la ciudad, poco antes de cabeza de Juárez creo, no estoy bien seguro, pero me da la impresión que es mas distancia de la que yo recorrí, mucho más.
Yo no tenía idea de que el hacía eso; no la tuve, hasta casi veintiocho años después. Y así cada año va cobrando sentido, mas y mas.

Parte Uno.

Me contaban que uno de mis sobrinos no llora cuando se pega o se cae. Hace berrinche y se enoja, patea y arremete en contra de lo que le pego, o contra lo que se golpeo, hace berrinche de furia, por eso dice su abuela que esta "Alinado".
Se refiere a que reacciona como Lino, su bisabuelo; mi abuelo. Maldecía y aventaba cosas cuando algo le salía mal o no le parecía, perdía los estribos con mucha facilidad.
En mi familia, los hombres, sus hijos y nietos, algunos guardamos rasgos del mismo temperamento aunque diluido por las generaciones, me imagino que uno trata de ser consciente, por la experiencia de lo ya visto y vivido de que reaccionar así de visceral-mente no beneficia, es al contrario por lo general.
Se me hacia obvio que como ejemplo, al ver sus reacciones uno las termino heredando, por repetecion, inconscientemente creyendo que era normal. Seguramente tuvo que ver, pero hoy pienso: Este pequeño niño que nunca conoció a su bisabuelo, y que no ha estado expuesto por parte de su padre y su abuelo a las mismas mañas (que son de caracter fuerte igual, pero mas contenidos) ¿como es que a tan corta edad da muestras de haber heredado el mismo temperamento? La diferencia es que no lo ha vivido, no como nosotros, no por el tiempo suficiente para empaparse de esta pequeña tempestad. Esto esta dentro de el.

Podría resultar coincidencia, no sabemos realmente que marca o de donde viene nuestra personalidad, algo que mas allá de la educación y los ejemplos de quienes nos crían viene con nosotros de fabrica.
Solo es mucha coincidencia que este niñito, aun sin estar consciente de lo que hace, lo trae, descendiendo de hombres que lo traían igual.
Le dicen genética, y tiene fundamentos científicos que seguro lo explicara, igual no me deja de sorprender.

miércoles, enero 05, 2011

Meet Me in the Basement - Broken Social Scene

martes, enero 04, 2011

"Tienes que amarlo por lo que es, no por el potencial de lo que puede ser".

Le dice Beca a Karen, su madre.